La pantalla-realidad

Tiendo a observar de forma curiosa y continuada el entorno que me rodea, de ahí, que a veces tenga la sensación de un escritor que pasea para inspirarse en su próxima creación literaria.

Uno de los puntos que observo de forma creciente por la calle, en el interior de los vehículos, en recintos públicos, viajando en el tren o en el metro,.., es la relación casi obsesiva del humano con la pantalla en los distintos dispositivos que posee especialmente el smartphone.

Dicho tema no es nada nuevo, pero no por ello, debería dejarnos indiferentes.

Me preocupa la obsesión y ansiedad que observo de bastante gente de diversas edades y condiciones mirando fija y constantemente dicha pantalla. Pasar rapidamente fotografías, aumentar, girar, visualizar, jugar,..

Insaciable nutricion de imagenes, impactos y titulares pero con una apariencia de no profundizar demasiado.

Interconexión permanente con redes sociales sin percantarse en algunos casos, de lo que sucede al lado.

Me intigra ver tambien la obsesion por hacer en todo momento fotos, videos, enviar mensajes… Sensacion incierta de vivir intensamente el momento en un mundo cada vez más digital.

A nivel de ejemplo reciente, fui a un acto publico de actuación infantil y muchos padres parecían cámaras de television, mas atentos de filmar y de fotografiar que de disfrutar de la actuación y haciendo distraer a sus vecinos de poderse concentrar en el espectáculo que ofrecían sus hijos-as.

Y podríamos añadir entre todos, muchos más ejemplos vividos que van en dicho sentido..

Me preocupa ver que es una actividad intergeneracional, incluido con las generaciones que vieron nacer las pantallas y los celulares.

Más guardar que vivir

Más tener que disfrutar

Desaprovechar conversaciones

Alejarse de tertulias

Conexión digital vs desconexión física

Pasar de puntillas por el paisaje

Menos mal, que la realidad aumentada nos puede facilitar a equilibrar pantalla, entorno y realidad.

Estemos atentos que nos dicen las pantallas..